Discutir la situación del territorio centroamericano fuertemente afectado por el cambio climático fue el objetivo central en este evento.
15 de noviembre de 2022., Sharm-El-Seikh, Egipto.- La discusión en este evento se centró alrededor de los altos niveles de exposición y vulnerabilidad observados en Centroamérica, especialmente derivado de las variaciones extremas de exceso y falta de lluvia. Para ello, se presentaron y discutieron los hallazgos del reciente reporte del Grupo de Trabajo 2 del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).
El evento Trayectorias resilientes al clima en Centroamérica: el papel del agua en sistemas de transición fue organizado por la Universidad del Valle de Guatemala (UVG), Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) y Climate Service Center, Germany (GERICS)
La actividad inició con la presentación del Dr. Edwin Castellanos de Guatemala, autor principal coordinador del capítulo sobre Centro y Sudamérica en el informe del IPCC. El Dr. Castellanos enfatizó la condición de alta exposición observada en la región debido a una alta densidad poblacional y crecimiento demográfico. También discutió la alta vulnerabilidad derivada de situaciones socio-económicas precarias en la población, especialmente alta pobreza y desigualdad. Finalmente, mostró los modelos climáticos futuros que indican que la región estará recibiendo menos lluvia a medida que la temperatura incremente. Esto resultará en un cambio en la composición de los bosques actuales y un mayor estrés hídrico para las zonas urbanas.
A continuación, la maestra Tania Guillén, de Nicaragua, contrastó los bajos niveles de emisiones de gases de efecto invernadero con los altos impactos observados por eventos extremos, por ejemplo, los recientes huracanes Eta y Iota en 2020 y Julia en 2022 y como estos eventos terminan aumentando la deuda de los países centroamericanos por la reconstrucción necesaria. Habló de los riesgos esperados y observados en la región en temas de seguridad hídrica, salud pública, seguridad alimentaria y daños a la infraestructura. Los altos impactos observados y esperados en la región presentan una situación de injusticia climática para una región que no contribuye sustancialmente a generar el problema, pero si recibe fuertes impactos derivados del calentamiento global. Así mismo, destacó la brecha de información existente sobre la región en términos de proyecciones climáticas, pero también en cuanto a las acciones de adaptación que ya se implementan en los territorios.
El Dr. Luis Fernández de México elaboró en el concepto de Rutas de Desarrollo Resilientes al Clima, concepto ampliado en el Sexto Informe con la inclusión del tema de desarrollo socio-económico incluyente. La adaptación al cambio climático no debe verse de forma aislada para cada sector, sino más bien abordarse de una forma integral. Las decisiones que se tomen por gobiernos centrales, locales y comunidades nos pueden acercar o alejar de una ruta resiliente al clima. Las decisiones de las sociedades que se caractericen por la inclusión, la justicia social, la inclusión de conocimientos diversos y el cuidado del ambiente nos permitirán una mejor adaptación a los cambios climáticos observados.
Finalmente, Adrián Martínez de la Ruta del Clima en Costa Rica complementó las presentaciones basadas en el reporte del IPCC con descripciones de situaciones reales que su organización ha observado trabajando con comunidades en la región. Las comunidades empobrecidas tienen cada vez menos capacidad de enfrentar las situaciones de clima extremo por lo que dependen fuertemente de apoyo externo, que en ocasiones llega de gobiernos locales, pero más frecuentemente, de cooperación internacional.
En la discusión con la audiencia se habló de situaciones de maladaptación que pueden tener efectos secundarios no deseados que pueden aumentar los riesgos de las comunidades. Se habló también de la alta exposición por la densidad poblacional que se observa en países como Guatemala y El Salvador y de la necesidad de buscar un desarrollo más incluyente para que las poblaciones más impactadas, que son las poblaciones pobres, puedan contar con los recursos necesarios para buscar la adaptación.