La nueva NDC de Chile se constituye en un instrumento relevante para la política climática del país. El reto ahora es pasar a su implementación y, para avanzar en ello, en el país persisten algunos desafíos importantes como: la institucionalización del marco de gobernanza y del uso de la evidencia científica como base para la toma de decisión; la definición de un plan de implementación, que incluya la identificación de las acciones prioritarias y de las necesidades de financiamiento; la repartición de las responsabilidades sectoriales; la instalación de un sistema de monitoreo, reporte y verificación robusto y confiable; los mecanismos para la participación del sector privado, gobiernos subnacionales y actores de la sociedad civil, entre otros.